Tras las desastrosas situaciones ocasionadas por la pandemia, muchos establecimientos y hogares se vieron obligados a utilizar nuevos y mejores métodos de desinfección para evitar la contaminación de los mismos y, por consiguiente, disminuir las posibilidades de transmitir o portar este virus.

Hoy, un año y pocos meses después, las precauciones siguen siendo pocas, y necesarias, para poder erradicar por completo las secuelas que ha dejado el virus Covid-19 en nuestras vidas.

Métodos de desinfección en hogares

Día a día entramos en contacto con elementos externos que pueden estar contaminados; ya sea en el trabajo, en algún bar o parque, o en el supermercado al hacer la compra.

Aunque utilicemos antibacteriales, toda precaución es poca para cuidar de nosotros y de nuestros seres queridos, ya que es muy complicado saber si realmente estamos a salvo o expuestos ante este virus.

Lo ideal es limpiar habitualmente, a diario si es posible, utilizando productos que contengan jabón y detergente, ya que este elemento puede inhibir y eliminar el virus de cualquier superficie. No es necesario hacer sesiones de limpieza a fondo; sin embargo, es necesario prestar especial atención a los espacios comunes y rincones concurridos como la cocina o el salón, sofás, cortinas, alfombras, suelos, ropa, toallas, mandos, etc.

Cuando hay visitas en casa es importante limpiar todas las superficies por donde estas estuvieron, aunque no haya sospecha de la existencia de la enfermedad, para prevenir cualquier tipo de contagio. Asimismo, algunas superficies comúnmente tocadas como los interruptores de luz, las perillas de las puertas, encimeras, llaves u otros accesorios, son cosas que deben ser desinfectadas a diario, ya sea con detergentes o con desinfectantes aptos para cada elemento.

Al utilizar los diferentes productos de limpieza, habrá que dejarlo unos segundos sobre las superficies y humedecer bien estas para que los componentes penetren bien y mejoren su efectividad. Al finalizar de limpiar, será necesario ventilar las habitaciones que se hayan desinfectado durante unos minutos y lavarse las manos con agua y jabón inmediatamente después, durante un mínimo de 20 segundos.

Métodos de desinfección en establecimientos

Cuando se trata de desinfectar establecimientos, las medidas higiénicas deben ser mucho más estrictas, ya que, diariamente, estos están expuestos a todo tipo de personas y sería imposible determinar dónde se puede alojar el virus y dónde no.

De igual forma, los utensilios de limpieza deben irse renovando o desinfectando frecuentemente.

En primer lugar, deberá planificarse una limpieza rutinaria estableciendo parámetros de implementos, equipos y otros recursos a necesitar, además de determinar los sitios que pueden ser foco del virus y que, por lo tanto, hay que poner mayor énfasis en la limpieza.

Por otra parte, el personal dedicado a la limpieza en dichos establecimientos debe estar bien protegido, con sus respectivas mascarillas, gafas, guantes y todo lo necesario para desinfectar.

Sin importar los productos de limpieza que se utilicen, es necesario seguir las instrucciones de cada etiqueta para no cometer errores que sean perjudiciales para la salud, como la aparición de asma, alergias o similares.

Nuevamente, al finalizar, la persona encargada de las tareas de limpieza deberá higienizar sus manos con agua y detergente o, en su defecto, con productos que tengan un mínimo de porcentaje de alcohol de un 60%.

Lista de productos desinfectantes aptos para inhibir el Covid-19

Además del alcohol y los detergentes, hay algunos productos corroborados por el INSST que, aunque no está completamente comprobada su efectividad, podrían ayudar a inhibir el virus.

Cabe destacar que, tal y como lo asegura el INSST, estos compuestos deben ser utilizados únicamente en superficies y no en seres vivos. Y no todos los componentes son de uso completamente público, ya que algunos deben ser utilizados por personal profesional y autorizado.

Algunos de los compuestos que pueden ser de dominio público son: Productos con cloro activo, etanol, peróxido de hidrógeno, ácido peracético y dicloroisocianurato sódico.