Las empresas de limpieza se ven afectadas por la congelación de los contratos públicos
Las patronales ASPEL y AFELÍN han denunciado que el Gobierno, ante el encarecimiento de los suministros y de los costes laborales, no ha actualizado los precios de las contratas. Las empresas de limpieza se ven afectadas por la falta de flexibilidad de la Administración en la contratación pública.
El sector de la limpieza se ve afectado por una modificación normativa de la ley de Desindexación de la Economía que impide actualizar los presupuestos ante una subida imprevista de los costes. Esta normativa, de la era de Rajoy, es la que ha provocado la congelación de los contratos en este sector, a diferencia de lo que ocurre en otras actividades.
El sector de la limpieza desempeña un papel relevante en la economía española ya que el supone el 1,05% del PIB, hablamos de cerca de 36.000 empresas, de media pymes, que emplean al rededor de 572.000 personas.
El presidente de AFELÍN, Jesús Martín declaró que “las tablas salariales de los convenios se están actualizando de media un 3%”. En la Comunidad de Madrid se ha renovado un plan de subidas trienal del 2,5% para este año, 2,5% para el 2023 y el 3% para el 2024. El presidente de ASPEL, Juan Díez de los Ríos, recalca de las subidas de las remuneraciones se han llevado a cabo por cuenta de la tesorería de las adjudicatarias sin haber tocado los pliegos.
Apoyo a los sindicatos
Las compañías piden una solución a este problema al igual que las constructoras han podido ayudarse de un salvavidas en la misma situación, aunque no han tenido mucho éxito. Las patronales proponen modular la normativa para facultar el recálculo de los precios de las licitaciones, previamente justificando unos sobrecostes mínimos del 2%.
Las patronales han conseguido en apoyo de las federaciones de servicios UGT y CCOO ante esta petición. Los sindicatos entienden que el modelo de concesiones requiere tener cierta flexibilidad ante las subidas imprevistas de costes, y más cuando son impuestas por los poderes públicos.
Por ahora, los ministros de Hacienda, Economía y Trabajo no han respondida de manera favorable. Ante esta negativa se hallaría la tesorería delicada del erario, además de saber que las compañías preferirían entrar en pérdidas antes que desatender los servicios públicos.
Aunque la administración juegue con estas cartas, el sector de la limpieza advierte que “No podremos aguantar así eternamente, entraremos en pérdidas o hay empresas que desaparecerán”, concluyó el presidente de ASPEL. Gracias a que socios gubernamentales como el PNV ya se han posicionado, las patronales confían en el que Ejecutivo entre en razón, pero toca esperar a ver cómo avanza la situación.