Cuándo se necesita limpieza de final de obra eficiente

Administrador/ julio 10, 2023/ Noticias

Si acabas de terminar algún tipo de obra de remodelación, por pequeña que parezca, debes saber que, antes de volver a habitar el espacio necesitas realizar una limpieza de final de obra.

Este tipo de limpieza es un trabajo minucioso y en el que, muchas veces, se requiere el uso de productos de desinfección e instrumentos específicos que suponen un servicio diferencial.

Los profesionales de la limpieza de obras son los que tienen el conocimiento y las herramientas necesarios para realizar la tarea, y así garantizar la seguridad del ambiente una vez finalizado el proceso de higienización y desinfección.

La limpieza final de obra es el tipo de servicios que se debe solicitar a una empresa de limpieza profesional siempre que se haya realizado una reforma, sea interior o exterior, pues se encarga de operaciones que involucran:

  • Remoción y recogida de polvo de todas las superficies en el ambiente y en los sitios contiguos;
  • Recogida de serrín y otros restos del armado de muebles y separadores interiores;
  • Remoción de restos de pintura en pisos y otras superficies como mesadas y lavabos;
  • Remoción de restos de escombros producto de demolición de tabiques, cambio de mobiliario o de artefactos;
  • Limpieza en profundidad y remoción de protectores, cuando se trata de la instalación de ventanas, estores y tabiques o separadores móviles.

Estos, son algunos de los tipos de suciedad que no están dentro de las actividades propias de los profesionales de la limpieza cotidiana en un edificio, y por lo tanto, requiere del trabajo de especialistas.

La limpieza de obra no una tarea de mantenimiento

Para llevar a cabo este tipo de tareas, que muchas veces se confunden con operaciones de mantenimiento, es importante considerar las fases que la integran:

  • Barrido: un paso básico para recoger los restos de escombros que hayan quedado esparcidos por el pavimento y que no son suficientemente grandes como para levantarlos manualmente o con pala.
  • Fregado del suelo: para levantar definitivamente el polvo y que no vuelva a levantarse mientras se realizan el resto de las tareas de limpieza de obra.
  • Limpieza de cristales: suelen ser los últimos elementos que se colocan en una obra y, muchas veces, quedan incluso con los protectores hasta el momento en que se realiza la limpieza de obra.
  • Limpieza de mobiliario: al igual que los cristales, los encargados de la reforma suelen dejarlos con las etiquetas y protectores hasta el final, ya que además suelen requerir de un proceso minucioso para evitar que se dañe la superficie al retirarlos.
  • Zonas comunes: la eliminación de la suciedad de la obra suele extenderse a zonas aledañas comunes con otros espacios cerrados y abiertos, como escaleras y rellanos, por lo que antes de finalizar, también habrá que hacer una limpieza de estas áreas.
  • Aseos y zonas de cocina: aunque la reforma no se realizara en estos espacios, habrá que dedicarles tiempo para realizar una limpieza y desinfección total antes de volver a ponerlos en uso.
  • Personal cualificado y debidamente protegido: pues la limpieza de obra puede resultar en el contacto con elementos contaminantes peligrosos para la salud.

La contratación de servicios profesionales de limpieza para el final de obra es la mejor elección después de haber invertido en una reforma, garantizando una limpieza eficaz y sostenible.

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